Caminaba un hombre por un desierto y encontró a una mujer sola, muy afligida, y le dijo: «¿Quién eres?». Ella contestó: «La Verdad». «¿Y por qué has dejado la ciudad y vives en el desierto?». Ella dijo: «Porque la men ra en empos an guos vivía solo con unos pocos; ahora está con todos los hombres, si es que quieres estar enterado».
La vida es muy mala y di cil para los hombres cuando la men ra prevalece sobre la verdad.